¡Menudo éxito ha tenido el pan de jamón! ¡Qué ilusión! Pues con las mismas ganas os traigo esta deliciosa receta de macarons navideños con crema de turrón de chocolate. ¿Cómo suena? ¡Espero que estupendamente! Es una receta que me hace mucha ilusión compartir y que espero que la disfrutéis tanto como yo. ¡Adelante con la nueva receta de macarons!

¿Hace cuánto no hacía macarons? ¡Muchísimo! Son unos dulces tan fascinantes... pero llevan un poco de trabajo hacerlos, por eso no me había animado de nuevo a hacerlo. Es verdad que en el libro, en "¡Corten! 100 recetas de película" hay una receta fantástica de macarons, de la película 'María Antonieta', de la que me enamoré. Es una fotografía tan bonita y una receta tan perfecta... ¡Tenéis que verla!

Estos he decidido que tenían que tener un toque más navideño, por eso he optado por hacer esta crema de turrón de chocolate o turrón de Suchard que le da un toque taaaaaaaaan de estas fechas, de Navidad. Además, es una crema que lleva tropezones pequeños de arroz inflado y ese cambio de texturas se agradece muchísimo en estos bocados, ¡os van a encantar! ¿Habéis hecho alguna vez macarons en casa? ¡Esta es vuestra oportunidad!

MACARONS NAVIDEÑOS DE TURRÓN DE CHOCOLATE Dificultad: Media Horneado: 15 mins Tiempo: 80 mins (aprox)  Temporada: Navidad Raciones: 16 personas Etiquetas: Postre, Aperitivo Adaptada de: ¡Corten! 100 recetas de película INGREDIENTES Para las coquillas 30 ml de agua 100 gr de azúcar blanco 30 + 30 gr de clara de huevo 100 gr de azúcar glas 95 gr de almendra molida 20 gr de cacao puro sin azúcar Para la ganache 250 gr de turrón de chocolate 40 gr de arroz inflado 120 ml de nata para montar Para decorar Una clara de huevo (35 gr) 200 gr de azúcar glas CÓMO SE HACE - Comenzamos con las coquillas, en un cazo ponemos el agua con el azúcar blanco y dejamos que se deshaga el azúcar y llegue el almíbar a 118 ºC. - Mientras, comenzamos a batir 30 gr de clara de huevo a velocidad media-alta, que vayan cociendo firmeza. Cuando el almíbar esté listo, lo añadimos poco a poco a las claras sin parar de batir y dejamos que se forme un merengue perfecto y firme. Reservamos. - En un bol tamiza el azúcar glas con la almendra molida y el cacao. Añadimos los otros 30 g de clara y mezclamos con la ayuda de una espátula. - Añadimos un tercio del merengue y mezclamos con cuidado, sin dejar que se baje mucho el merengue, pero aligerando el mazapán. - Añadimos el resto del merengue e integramos con cuidado, sin fuerza, con movimientos envolventes, hasta conseguir una masa que caiga como una cinta de la espátula. - Rellenamos una manga pastelera con boquilla redonda con la masa. Vamos dibujando círculos de masa sobre una bandeja de horno con papel de hornear, presionando en posición vertical sin tocar la base. Déjadlos secar hasta que a tocarlos no estén pegajosos. - Precalentamos el horno a 160 ºC durante 10 minutos. Bajamos la temperatura a 155 ºC y horneamos las coquillas durante 12 minutos o hasta que se puedan despegar bien de la base (probad con alguno de la esquina y, si no, dejadlos 1 minuto más). - Dejamos que se enfríen en una superficie lisa. Una vez fríos, las metemos en un recipiente hermético al menos 24 horas. - Para la crema de turrón de chocolate, calentamos la nata hasta que esté a punto de hervir. - En un bol amplio, troceamos el turrón en trozos pequeños. Añadimos la nata caliente y dejamos un minuto reposando. Mezclamos bien hasta conseguir una mezcla perfecta. Añadimos el arroz inflado (opcional) y dejamos que coja consistencia. - Cuando la ganache o crema de turrón de chocolate tenga la consistencia perfecta, rellenamos una manga pastelera con boquilla redonda (o cortamos la manga con una tijera). No debe ser un agujero muy pequeño, o no saldrá la crema, ya que lleva tropezones. - Rellenamos los macarons con cuidado. Podéis hacer un círculo o presionar sobre el centro y que se vaya expandiendo, a vuestra elección. - Tapamos los macarons y vamos a decorarlos con glasa. - Para preparar la glasa tenemos que batir las claras pasteurizadas con el azúcar glas tamizado a una velocidad constante. Es recomendable que guardemos dos o tres cucharadas de azúcar glas por si acaso hace falta cambiar la consistencia más adelante.  - Debemos batir hasta conseguir una consistencia parecida a la de la pasta de dientes, un pelín más líquida. Si vemos que no lo conseguimos podemos añadir un poco de agua, unas gotitas, pero no nos pasemos, vamos añadiéndolo poco a poco. Si nos pasamos con el líquido, corregimos con el azúcar reservado. - Rellenamos una manga pastelera con la grasa real y decoramos los macarons como si hubiese nevado sobre ellos. - Reservamos en la nevera, guardados en una caja de metal, o en un lugar fresco. Están mejor un día después de haberlos rellenado. O dos. Si aguantáis. ¡A disfrutar! TRUCOS Y CONSEJOS Podéis decorarlos o no, como vosotros queráis. Podéis usar el relleno que más os guste, pero este es muy navideño. Podéis añadir frutos rojos en el centro del macaron para hacerlo más fresco y delicioso.