La verdad es que cada vez que llega esta fecha, me viene la misma pregunta: ¿y qué tarta hago yo ahora? Pues este año me he lanzado a adaptar uno de mis postres favoritos: El Tiramisú. No puedo decir que sea 100% tiramisú, claro, pero está inspirado en él: bizcocho de café bañado en Amaretto, crema de mascarpone y trocitos de chocolate. Al menos, los ingredientes están ahí. Y es una tarta deliciosa. Que eso era lo importante; endulzar este último año.

Ha sido un año muy especial, por muchos motivos. Uno ya lo sabéis todos y es que esta Pandemia no nos ha dejado disfrutar como quisiéramos de muchas de las cosas que nos han pasado. Pero no me apetece hablar de lo malo y me voy a centrar en lo bueno. A nivel bloguero, he publicado por primera vez mis recetas en una revista. En mayo, en plena pandemia, publiqué en Lecturas Postres algunas de mis recetas y fue súper emocionante. Y pensaba que eso iba a ser lo más...

Un mes más tarde recibí una llamada que me cambiaría el año por completo. Col&Col contaba conmigo para hacer un nuevo libro de la editorial. Y así es como mi año dio un giro y me ha dado una de las mejores cosas que he hecho en mi vida: coescribir un libro. Y lo he hecho con un equipo formidable: Martín, de Col&Col; Teresa Vivancos, Ana Cocinitas y Bea de I love Bundt Cakes. ¿Quién nos iba a decir a nosotros cuando todo empezó que íbamos a acabar escribiendo un libro? Nadie. Pero ya tenéis con vosotros a nuestro pequeño: Dulces todo el año.

Así que me quedo con lo mejor de este 2020 y por eso hoy celebro que se está acabando pero también todo lo bueno que me ha traído y este año más junto a todos vosotros. ¡Sois lo más y nunca acabaré de dar las gracias por todo lo bueno que me dais!

TARTA TIRAMISÚ Dificultad: Fácil Horneado: 45 mins Tiempo: 80 mins (aprox)  Temporada: Invierno, Navidad Raciones: 12 personas Etiquetas: Layer Cake, Tarta INGREDIENTES Para la base 270 gr de azúcar 200 ml de aceite de girasol 4 huevos 330 gr de harina 16 gr de levadura en polvo Una cucharadita de vainilla en pasta 200 ml de café intenso hecho Para el sirope 100 ml de agua 60 gr de azúcar Un chorrito de Amaretto Para el relleno 200 gr de mantequilla a temperatura ambiente 180 gr de azúcar glacé 400 gr de mascarpone 150 gr de chocolate negro Para la decoración Cucuruchos de barquillo de chocolate CÓMO SE HACE - Comenzamos con la base, el bizcocho. Precalentamos el horno a 175ºC. Engrasamos bien dos moldes de 20 cm de diámetro. - En un bol mezclamos el aceite con el azúcar hasta que esté bien integrado. - Separamos las claras de las yemas de los huevos. Añadimos las yemas a la mezcla anterior y montamos las claras a punto de nieve con un punto de sal (ayudará a montar). Reservamos. - Añadimos la vainilla a la mezcla de aceite, azúcar y yemas y mezclamos todo bien. - Tamizamos la harina con la levadura y añadimos la mitad a la mezcla. Mezclamos bien con una espátula y movimientos envolventes.  - Añadimos la mitad del café y repetimos la forma de mezclar. - Acabamos con la harina y después con el café. Cuando esté todo bien mezclado, añadimos las claras y mezclamos con cuidado, sin fuerza, con movimientos envolventes, para que se mezcle pero no pierdan mucho aire. - Separamos la masa en dos. Yo las he pesado. Vertemos las dos masas en los dos moldes. Alisamos la superficie si es necesario. - Horneamos durante 45 minutos o hasta que al pinchar con un palillo, este salga limpio. - Dejamos 10 minutos en el molde y desmoldamos. Lo dejamos enfriar en una rejilla.  - Yo he usado los dos bizcochos enteros, pero podéis cortarlos con una lira y alisarlos ligeramente. Yo he preferido dejarlos con su cúpula, por eso al cortarlo parece un reloj de arena. - Para hacer el sirope, en un cazo ponemos el agua con el azúcar y ponemos a fuego medio para que se derrita el azúcar. Cuando lo tengamos, añadimos el Amaretto y retiramos el fuego. Reservamos. Yo lo hice el día anterior. Podemos usar más azúcar, pero no quiero añadir mucho dulzor. - Comenzamos con la crema del relleno de mascarpone. En un bol y mezclamos bien con una batidora la mantequilla con el azúcar hasta que blanquee. Tiene que mezclarse bien y que no se noten los granitos. - Añadimos entonces el mascarpone y mezclamos bien hasta que se haya conseguido una crema muy lisa y homogénea. A mi parecía que se me había cortado y decidí seguir batiendo hasta que se me quedó perfecta (por si os pasa lo mismo. - En una batidora o trituradora, trituramos el chocolate hasta que quede en cubitos pequeños. No queremos polvo, se tiene que notar. - Vamos a comenzar con el montaje de la tarta. Lo primero que vamos a hacer es pincelar con una brocha de cocina nuestros bizcochos con el sirope. Lo que buscamos es que queden más jugosos, pero no os paséis o se nos destrozarán los bizcochos. - Sobre un plato o una base desechable, ponemos una de las capas de bizcocho. Añadimos algo más de un tercio del relleno de crema de mascarpone. Añadimos los trocitos de chocolate por encima, cubriendo la crema. - Ponemos la otra capa de bizcocho y cubrimos con la crema de mascarpone, alisando los laterales. - Yo la he decorado a modo de naked cake, es decir, que no la he cubierto toda de nata, sino que solamente la he sellado ligeramente por los bordes. Podéis si queréis cubrirla íntegramente. - Decoramos con barquillos de chocolate troceados y con cinco de ellos he creado una figura geométrica en la parte superior de la tarta. - Servimos a temperatura ambiente. - Al ser una tarta que lleva mascarpone, es mejor conservarla en la nevera hasta media hora antes de su consumición. ¡A disfrutar! TRUCOS Y CONSEJOS En vez de sirope de licor para empapar los bizcochos, podéis utilizar un almíbar sencillo, café con leche o leche sola, simplemente, por ejemplo. ¡Seguro que está delicioso! Podéis usar otras cremas de relleno. ¡Las combinaciones son infinitas!