Hoy os traigo un delicioso bizcocho rústico con melocotón y jinjoles, una receta que me ha encantado por lo jugoso y sabroso que queda el bizcocho. Una receta con la que dar la bienvenida oficial al otoño y la despedida total al verano gracias a la presencia de los jinjoles, un fruto que encarna a la perfección esta temporada.

Con la tontería, ya ha llegado el otoño. Sin embargo, esto no es una mala noticia, por lo menos para mí. Me encanta esta estación (y el invierno) porque soy más de frío que de calor... y me encantan las recetas típicas del otoño. Me encanta el olor a especias dulces, a canela jengibre, cardamomo... que me viene siempre que pienso en estos meses.

No me podéis negar que las recetas que vamos a empezar a hacer a partir de ahora son las mejores. Las tardes largas de horneado sin miedo a morirte de calor... Las recetas calientes... Chocolate... Calabaza y castañas... ¡Empieza lo bueno!

Esta receta se la quiero dedicar a una compañera de trabajo, Mar, que me ha ayudado a descubrir un nuevo ingrediente: los jinjoles. Son unos pequeños frutos con un sabor similar al de la manzana y que son típicos del fin del verano y el comienzo del otoño. Cuando me los trajo al trabajo en seguida supe que podía preparar una deliciosa receta de bizcocho con ellos... ¡Y aquí está! ¡Gracias Mar!

Como era de esperar, este bizcocho lo llevé al trabajo... y es uno de los que más ha gustado, sin duda. A todo el mundo le encantó el toque esponjoso, jugoso, un pelín húmedo y sabroso de este bizcocho con un toque rústico... ¡No os lo podéis perder! En caso de que no encontréis los jinjoles, no os preocupéis, sustituidlos por manzana y punto... ¡Estará buenísimo seguro!